Mientras recorría en mi mente lo hermosa que fue mi vida, me siento vacía, por que realmente jamás fui una niña, madure antes que los demás, por que siempre se me obligo ser mejor que los demás, en vez de muñecas libros se me dieron, en vez de cariños y abrazos o algún te amo, siempre regaños.
Hoy sumida en mi mente solo me dejo guiar por eso que me resiente, jamás me había sentido llena de ira, jamás hubiera pensado en esto en algún momento de mi vida, escucho una voz que me empieza a cantar un linda canción que me insita en esta misión que tengo en mi pequeña imaginación, siento un poder que proviene desde muy dentro de mi alma y siento como sana mis heridas.
Me veo parada enfrente de las habitaciones de mis hermanos y mis padres veo a una chica que me invita a entrar al cuarto de mis padres y veo un lindo show donde la niña tortura a mis padres, les destaza, veo correr su sangre y eso me calma, de bufanda me pone los intestinos de mis padres y me ofrece un trozo de mis padres cual como con gracia.
Durante el día me encuentro tirada en el suelo de mi casa, toda ensangrentada y una niña en la puerta me grita, listo esta tu venganza consuma es, hoy te vengue a ti, pero un precio pagaras por ello mira la casa y veo tu venganza, la niña desapareció y veo con horror la sangre en las paredes y los trozos de carne en el suelo pero que paso veo un cuchillo a mi lado, la niña me inculpado.
No señor yo no fui, fue la niña, nadie me creyó hoy encerrada estoy en este internado mental, siempre en momentos de ira veo a la niña con su risa que me mira, solo se que algún día yo me vengare con mi ira a toda prisa y esa niña sufrirá.
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